Mañana, según Rajoy, día de la patria, entre otras cosas, hay que salir a la calle a celebrar que eres español, lo maravilloso que es serlo y el orgullo de demostrarlo. Con la familia, con los amigos, con un señor de Teruel y su señora de Soria, que pasaban por allí para dejar constancia de que sus provincias existen.
Es increíble que nos vengan con mensajes trasnochados de españolismo barato, incitándonos a sacar la rojigualda de paseo para que todos vean que seguimos celebrando el día de una España recalcitrante y falangista que vive en las retorcidas mentes de la derecha española. Hispanidad, fuerzas armadas, rey porque no les queda más remedio, todo ello con un aroma de naftalina anti-democrática.
Clamor republicano invita mañana a todos los que se sientan ciudadanos, como no, al señor de Teruel y a la señora de Soria a que salgan a la calle, a las plazas, a los balcones de sus casas (al que tenga la suerte de tener casa o balcón) con la verdadera bandera de este país de países, la Tricolor. Una bandera de tolerancia, de dignidad, de fraternidad, de justicia social, de ética y de DEMOCRACIA.
Que ondeen bien alto, que sean muchas, para que sientan todos esos nostálgicos del Caudillo que mañana España, mal que les pese, será republicana.
La Plataforma Adelante Cataluña, que cuenta con el apoyo de las formaciones derechistas Alternativa Española (AES) y Democracia Nacional (DN) utiliza un niño con la cara pintada con la bandera de España para animar a celebrar el día de la Hispanidad. Todo el mundo sabe que los niños españoles son todos tan rubios que parecen albinos y que tienen los ojos tan claros que parecen transparentes. Como aquellos antepasados suyos que subidos en rumbosas embarcaciones de vela atravesaron el Atlántico para expoliar y exterminar a las poblaciones de ese nuevo continente que ya fue descubierto por los vikingos hacía un tiempo. La gloria y el oro para la madrastra patria y el hambre para aquellos hijos que nunca pidieron ser adoptados. Los republicanos no aspiramos a imperios perdidos, ni creemos en las razas superiores, ni en las leyes de los ejércitos, por eso le decimos a Rajoy que no vamos a celebrar días de patrias que no reconocemos.
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